¿Qué es la declaración de herederos y por qué es importante?
Cuando una persona fallece sin dejar testamento o cuando el testamento es impugnado, se abre la posibilidad de iniciar una declaración de herederos. Este proceso legal te permite determinar quiénes son los herederos legítimos y cómo se debe repartir la herencia.
Entender cómo funciona este acto notarial es importante si estás atravesando un proceso de sucesión, especialmente si hay desacuerdos familiares, documentos confusos o falta de testamento. Contar con el acompañamiento de un abogado de familia especializado puede marcar una gran diferencia en el resultado del trámite.
Este es un trámite cada vez más habitual en España. De hecho, según un artículo reciente de La Sexta, en 2023 se registraron más de 200.000 transmisiones por herencia. Este dato refleja cómo, en la práctica, cada vez más familias deben enfrentarse al proceso de repartir una herencia, con o sin testamento.
¿Cuándo es necesaria una declaración de herederos?
Este acto puede iniciarse cuando existen dudas razonables sobre la validez del testamento, ya sea por errores formales, omisiones o conflictos entre los posibles herederos. En este contexto, conocer tus derechos y actuar con rapidez es fundamental para proteger tu posición legal.
Ahora bien, es imprescindible en los siguientes casos:
- El fallecido no dejó testamento (sucesión intestada).
- El testamento ha sido declarado nulo o está siendo impugnado.
- El testamento no menciona a todos los herederos legales, ya sea por olvido, error o conflicto.
¿Quién puede solicitarla?
Cualquier persona con interés legítimo en la herencia, como:
- Cónyuge superviviente
- Hijos/as o descendientes
- Padres u otros ascendientes
- Hermanos/as o sobrinos/as
- Pareja de hecho registrada
Pasos para iniciar una declaración de herederos en España
Solicitar una declaración de herederos no es complicado, pero sí requiere seguir ciertos pasos legales. Aquí te los explicamos paso a paso:
1. Reunir la documentación necesaria
Para iniciar el trámite deberás contar con:
- Certificado de defunción del fallecido
- Certificado del Registro General de Actos de Última Voluntad
- Certificado de nacimiento y/o matrimonio del solicitante
- DNI o NIE del solicitante
- Libro de familia o documentación que acredite el vínculo
- Certificado de empadronamiento del fallecido
2. Solicitar cita ante notario o juzgado
Aquí es donde se marca la diferencia entre una tramitación más ágil o una más compleja. Todo depende del tipo de vínculo familiar con la persona fallecida.
¿Cuándo acudir a un notario?
Si eres hijo, padre, madre, cónyuge o pareja de hecho registrada, puedes acudir directamente a un notario. La ley permite que el procedimiento se tramite por vía notarial en estos casos, lo que lo hace más rápido y menos costoso.
El notario deberá tener competencia territorial, es decir, estar ubicado en el lugar donde el fallecido tuvo su último domicilio habitual o donde se encuentran la mayoría de sus bienes.
¿Cuándo es necesario acudir a un juez?
Si no hay familiares directos, y los posibles herederos son colaterales (hermanos, sobrinos, tíos…), la declaración debe tramitarse por vía judicial. Este proceso es más largo y puede requerir la intervención de un abogado herencia para representar los intereses de las partes implicadas.
3. Declaración formal ante notario o juez
Una vez presentada la documentación y elegido el canal adecuado (notarial o judicial), se inicia la fase de declaración formal.
¿Qué ocurre en esta fase?
- Se abre un expediente de declaración de herederos.
- Se citan a dos testigos, que deben conocer al fallecido y su situación familiar.
- El notario o juez revisa toda la documentación y escucha los testimonios para verificar que no hay herederos desconocidos o conflictos en curso.
Es importante que los testigos no tengan interés directo en la herencia. Pueden ser amigos, vecinos o compañeros del fallecido. Esta fase es importante para confirmar la legitimidad de los solicitantes y evitar futuras impugnaciones.
4. Resolución final y acta de declaración de herederos
Tras la fase de instrucción y una vez transcurrido el plazo legal (normalmente 20 días hábiles desde la apertura del expediente), se dicta una resolución formal.
¿Qué incluye esta resolución?
- Una acta notarial o resolución judicial donde se reconoce quiénes son los herederos legítimos.
- La mención expresa del parentesco y los derechos hereditarios de cada persona.
- La posibilidad de usar este documento para seguir con el reparto de bienes, pago de impuestos y aceptación de la herencia.
Esta acta tiene un valor legal pleno y es imprescindible para realizar cualquier trámite relacionado con la herencia, desde vender una propiedad hasta cerrar cuentas bancarias del fallecido.
Tiempos y costes del procedimiento
El tiempo promedio para obtenerla es de entre 20 y 30 días hábiles, aunque puede alargarse si hay documentación incompleta o conflictos entre herederos.
En cuanto a los costes, estos varían según la complejidad del caso y los honorarios del notario o abogado. En general:
- Actuaciones notariales: entre 200 € y 400 €
- Honorarios del abogado: entre 500 € y 1.500 €, dependiendo del caso
Contar con un abogado especializado desde el inicio puede ayudarte a reducir errores y acortar los plazos.
¿Qué ocurre si hay conflicto entre herederos?
Los desacuerdos entre herederos pueden frenar o complicar el proceso de sucesión. En estos casos, lo más habitual es:
- Acudir a mediación familiar
- Iniciar procedimientos judiciales si no hay acuerdo
- Impugnar la declaración de herederos si se considera que no es correcta
¿Qué diferencia hay entre testamento y declaración de herederos?
Es normal confundirse entre estos dos conceptos. Aquí te lo aclaramos:
- Testamento: Documento redactado en vida por una persona para dejar constancia de su voluntad sobre el reparto de sus bienes.
- Declaración de herederos: Proceso legal para determinar quiénes heredan cuando no hay testamento o este no es válido.
Aunque ambos se relacionan con la herencia, tienen finalidades diferentes. Si bien el testamento refleja la voluntad del fallecido, la declaración de herederos suple la falta de ese testamento o lo impugna por motivos legales.
¿Qué hacer después de la declaración de herederos?
Una vez tengas el acta notarial o judicial que te reconoce como heredero/a, deberás:
- Liquidar el impuesto de sucesiones y donaciones
- Realizar el inventario de bienes
- Aceptar la herencia de manera formal
- Proceder al reparto o adjudicación de bienes entre herederos
Este proceso debe hacerse dentro de los seis meses posteriores al fallecimiento, aunque puedes solicitar una prórroga si es necesario.
¿Cuándo conviene contratar un abogado?
La gestión de herencias puede ser compleja, especialmente si hay bienes en varias comunidades autónomas, herederos en desacuerdo o dudas sobre la validez del testamento.
Por eso, te recomendamos buscar ayuda profesional en los siguientes casos:
- No hay acuerdo entre los posibles herederos
- El testamento contiene cláusulas confusas
- Hay herederos menores o personas incapacitadas
- El patrimonio incluye deudas o bienes en el extranjero
Recupera el control en un momento clave
Perder a un ser querido ya es difícil de por sí. Si a eso se suma la incertidumbre legal, puede volverse aún más complicado. Por eso, iniciar correctamente una declaración de herederos no solo te da tranquilidad legal, sino que te permite avanzar con claridad y justicia.
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